La experiencia nace vestida y el sentimiento corre desnudo, los ríos de la ilusión abonando los fértiles campos de los sueños...
Una dimensión no es más que un campo de energía que rodea a otro todavía mayor, porque todas existen a la vez y en el mismo espacio, aunque vuestros cinco sentidos solamente sean capaces de revelaros la más densa de todas ellas. Aunque todo cambiaría con el tercer ojo completamente abierto, entonces tendríais libre acceso a las energías altamente evolucionadas de las dos primeras esferas superiores. Recuerda que ascender de dimensión representa vibrar más rápido, percibiendo en el mismo espacio más cosas de las que antes habían (energías, emociones, pensamientos y entes).
Cuando el fuego se queda dentro se atraganta el alma y el corazón arde de dolor, el magma de los sueños rotos consumiendo todas las ilusiones...
La dimensión física:
Si el hombre hubiera elegido la senda de la naturaleza para evolucionar no tendrías que experimentar ningún sentimiento negativo, la humanidad entera tendría su tercer ojo abierto y todos seríais avatares, devas y seres de luz. Pero lamentablemente habéis escogido el camino de la materia para dar sentido a la vida: asfaltando, perforando, vaciando y contaminando el planeta que os sustenta. ¿Vais a tener el valor de dejarlo todo y volver a sentir las mieles de la naturaleza en vuestros corazones?...
La dimensión astral y mental:
Son las dos primeras dimensiones de la energía y las primeras que alcanzan el alma cuando abandona el cuerpo, También se las conoce como las esferas de los espíritus que no quieren marchar, un carrusel de almas en pena que no aceptan su nuevo estado y se resisten a coger el túnel. Estas dos dimensiones son puramente sentimentales y con el tercer ojo abierto percibirás que todo irradia luz propia (el aura), a la vez que sentirás las emociones y pensamientos abstractos de todo lo que te rodea. Recuerda que después de la muerte cada alma alcanza la dimensión que mejor sintoniza con su vibración-evolución.
La dimensión Búdica:
La primera de las cuatro dimensiones superiores y donde ya no encontrareis ningún alma perturbada, una esfera pura donde todos sus entes son almas puras desencarnadas y energías con un alto nivel de inteligencia y sentimiento. A partir de aquí ya podrás acceder a los archivos akásicos, el registro energético, visual y emocional de todo lo acontecido en los distintos mundos del universo.
La dimensión Crística:
La esfera natural de todos los grandes avatares y devas de la antigüedad, pues las energías que la forman vibran tan rápido, que aquel que tiene dominio sobre ellas es capaz de realizar casi cualquier milagro (Jesucristo bebía directamente de esta esfera y fue uno de los grandes creadores de realidad). En esta dimensión la materia ya no existe como tal, por lo que sólo podrás ver su aura y los sentimientos que todavía expresan.
La dimensión Nirvánica:
La esfera natural de los seres de luz y donde se dan cita los seres y energías más evolucionadas del universo. En esta dimensión se dan cita las energías que crean los planos inferiores, siendo a la vez observador y cooperador desde arriba de todo lo que existe más abajo.
La dimensión Cósmica:
La esfera por excelencia de los seres cósmicos, los guardianes de los universos que cooperan directamente con el creador y pueden comprender toda su gran obra. Aunque poca cosa se sabe de esta última dimensión, tan sólo puedo deciros que los que la alcanzan están ya muy cercanos de fundir su alma con la del supremo creador.
Sólo quien ha superado el abismo de la soledad puede ser libre...
Recuerda que la materia sólo es la expresión más densa de la energía, pues cuanto más rápido vibres, más cosas verás y sentirás, más sentimientos expresarás y mas milagros realizarás.
Conviértete en un aprendiz de sueños, aquel que lanza sus hechizos de amor hacia el infinito de las estrellas...
No hay comentarios:
Publicar un comentario